Hace unos años la gente se reía de este hombre. ¡Todo un director del Banco Mundial con tomates en los calcetines! ¡Pobres ignorantes! Este señor contaba con información privilegiada y sabía ya la crisis que se avecinaba.
Pocos años después este hombre que luce tan gracioso tocado fue nombrado mandamás del FMI que no es una emisora de Frecuencia Modulada, sino el Fondo Monetario Internacional. En Asturias todos sabemos lo que ye un RATO pero baste decir que, aunque con el birrete y la toguilla se le podría tomar por el Dalai Lama de la economía, tampoco estuvo muy iluminado a la hora de prevenir, mitigar ni resolver la crisis y sus efectos.
Poco después fue sustituido por ese señor tan mono de la derecha. Al señor Strauss le tocó bailar con la más fea. Pero a él con tal de arrimar la cebolleta no le importaba bailar con feas, guapas o lo que sea en un frenético intento de joderlo todo y a todos.
La señora que posa aquí junto al mandril, ignorante del peligro que corre, es la candidata más aventajada en la carrera por dirigir el Fondo Monetario Internacional.
Pero yo he encontrado una candidata mucho mejor: mi madre.
Esta economista sesuda, con el dominio tan solo de dos o tres de las cuatro reglas ha sabido construir un modelo matemático que le ha permitido sobrevivir a todas las crisis desde la Posguerra. Sus atinados cálculos le permitieron multiplicar los panes y los peces, sin que faltara nunca un langostino en Nochebuena, ni un regalo para todos en Reyes.
Ha negociado con tenderos, exprimiendo la mermada liquidez, superando devaluaciones, inflaciones y transiciones de la peseta al euro con mucha mano izquierda.
Ha sabido optimizar los recursos y multiplicar los espacios mucho mejor que los diseñadores de IKEA acomodándonos a los 8 en un pisito de 70 metros. Y todavía se permitía el lujo de traer invitados a dormir a casa, dóndecabendoscabentresssss.
Pero su mayor mérito es que todo lo ha hecho sin robar jamás un solo céntimo, sin engañar a nadie en beneficio propio, sin adquirir más deudas que los plazos de una lavadora o una enciclopedia, eso sí, sin retrasarse un solo día en los pagos...
Y todo ello sin pedir nada a cambio.
Qué bueno.
ResponderEliminar¿Y no podría pasar unos años antes por el ministerio de economía?
Yo propongo a mi madre para ir en el equipo, de vicepresidenta o algo. No sólo harían un buen trabajo sino que además generarían concordia. Aunque ya me veo a Obama, a Sarkozy o a Puttin haciendo pucheros después de una buena bronca.
¿De verdad quisieras ver a tu madre dirigiendo esa "jaula de grillos" de economistas inútiles? ¿Sucediendo al "simpático""picha-brava" acosador? ¿tan poco la quieres?
ResponderEliminarPazzos, que te veo desheredado.
Yo, a la mía, por si acaso, no le propondré "regalitos" como esos.
Mejor unas flores, o el siempre socorrido perfume
HombreRevenido, bienvenido (qué ripio).
ResponderEliminarSin desprecio para tu madre, en tu tierra tenéis otra buena candidata,
Isabel Teruel.
Esta especie de Cañizares de la política tiene el mérito de no sobrevivir a su primer discurso en un parlamento y eso está al alcance de muy pocos.
Por cierto, ¿que fue de ella?
Koolau, la única herencia que deja una buena madre es su educación.
ResponderEliminarHombre Revenido, por cierto ¿el mandril Strauss habrá estudiado Economía en su Academia de Chimpancés como estudiante de intercambio?¿suspendió en conducta?
ResponderEliminarPensaba que el mandril en cuestión se habrá encontrado esos días que estuvo en la jaula con el babuíno-madoff y deben haber tenido enormes intercambios. (Aunque bien pensado, creo que en esos lugares sólo hay intercambios cuando se te cae el jabón en las duchas).
ResponderEliminarTambién pensaba en una reunión entre esos dos elementos, con Berlusconi y tal vez Briatore.
Definitivamente que su señora madre dirija eso, y tal vez en sus ratos libres aún pueda arreglar otras cosas.
No sé qué fue de Isabel Teruel, primero la escondieron y después, imagino, le pegarían un par de tiros.
ResponderEliminarA mí su incompetencia no me sorprende, el parlamento de Aragón está repleto de inútiles.
El mandril estudió con nosotros un semestre. Pero le tuvimos que pedir que se largara. Menudo era el tío, era capaz de tocarle el culo a una tortuga (por debajo del caparazón).
HombreRevenido, no me extraña que metiera mano a la tortuga porque este tío tiene más conchas que un galápago.
ResponderEliminarTale, creo que confundes las especies: Madoff es un ma-caco, Berlusconi es un sí-mío y Briatore es un Homo Erectus rodeado de gorilas.
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