Le gustaba ser carcoma en el corazón de las mujeres.
Roer y corroer con palabras de amor su carne palpitante.
Disfrutaba al resecar la víscera sangrante
al taladrar arterias y válvulas
para succionar los fluidos vitales
con sed de mil desiertos
hasta transformar lo vivo en fósil
y dejar un resto de serrín por huella
en el lugar del crimen.
en el lugar del crimen.
Pues sí, hay hombres así de letales. Mujeres también.
ResponderEliminarUn beso, Pazzos
Novicia, otro día ya hablaremos de ese tipo de mujeres, de momento, permíteme entonar el "mea culpa"
ResponderEliminarsi te flagelas, el castigo puntúa más :D
ResponderEliminarNovicia, préstame tu cilicio para mortificarme que te vas de vacaciones y con el bikini no te pega nada.
ResponderEliminarRecibe un besote en tus llagas.
Le envío la pócima:
ResponderEliminarPdiclorobenceno (0,5-1,5%);
resina acrílica (3-5%); disolvente para dicha resina acrílica (33-36%); polímero acrílico termoplástico (3,5-5%); disolvente para dicho polímero acrílico
termoplástico (34-37%); extracto de eucalipto (0,5-1%); agua (19-22%).
Si le falta algún ingrediente no se preocupe: arrepentirse, por mucho que digan, es sano. ¿Una caladita?
Besos.
De verdad: entre Novi y tua estais de un místico veraniego que ya me duelen las llagas y todo.
ResponderEliminarPués a la carcoma hay que iyectarle veneno y lo mísmo hay que hacer con este tipo de carcomeros o carcómanos o como se diga.
Feliz verano Pazzo.
Tal vez lo desconozca pero existe cierto fenómeno, poco frecuente por cierto, en el que el efecto de las palabras es el contrario al deseado por el hombre carcoma. Sin proponérselo y ajeno a la fatalidad, el goteo lento de susurros de amor no solo consigue convertir lo casi fosilizado en tejido vivo y palpitante, sino que para su desgracia, hay un proceso de revitalización tal, que termina siendo blanco de palabras y obras sin omisiónes que valgan. Cuidado y saludos.
ResponderEliminarMrs Nancy Botwin, nunca dejarán de sorprenderme tus conocimientos de todo tipo de tóxicos pero ¡¡¡Invitarme a una caladita de Polil!!!
ResponderEliminarBertha, te voy a recomendar un libro a ver si se te quitan las ganas de fumigar carcomas: Una historia del mundo en 10 capítulos y medio de Julian Barnes. Podrás comprobar que este modesto bichillo ha tenido una importancia trascendental en la Historia de la Humanidad. LÉELO.
ResponderEliminarAnónimo, un comentario muy turbador el tuyo. ¿Puede la palabra resucitar la carne? Quizás alguien sepa hacerlo pero los hombres carcoma no podemos. Eso sólo está en manos de hombres de otra pasta.
ResponderEliminarLos hombre carcoma tienen un problema, cuando se topan con la viuda negra, se crea un interesante conflicto de intereses, a ver quien extrae mas sabia a quién.
ResponderEliminarUn abrazo H.C.
Clip, si compiten a succionar yo siempre apostaría por una viuda.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl silencio sí que corroe.
EliminarEl silencio corroe como el vitriolo. Habla.
Eliminar...me lo apunto ya que después de un curso me hace falta ilustrarme con cosas serias.-Muchísimas gracias Pazzo el fondo que te tiene intrigado es un tapiz.
ResponderEliminar¿Barnes serio? Pero si este libro es ideal para leer en la tumbona con un tinto de verano.
ResponderEliminarNo lo conozco pero siendo una recomendación tuya tiene que ser algo con bastante chispa!.Muchísimas gracias Pazzo.
ResponderEliminarPalabras de amor, calor, alusión al vampirismo, y ese puntito... cuanto sufro por se tan malo!Éxito seguro en la literatura para mujeres. Ya lo has visto. Y somos el 50% de la población, que no está nada mal como público. Así que toma nota.
ResponderEliminarBromas aparte, eres genial. Cuando eres Pazzos y cuando eres Sozzap y hasta cuando no se sabe quien eres.
¿Por quién me ha tomado?
ResponderEliminar¿Le ofrezco un antídoto contra el arrepentimiento que carcome el alma en forma de calada y cree que le estoy envenenando?
Pues de alguna manera, sí. Pero con cariño...
Lunanueva, mi arrepentimiento es sincero, mi propósito de la enmienda nulo.
ResponderEliminarMrs Nancy Botwin, si hacemos caso al manual "El asesinato considerado como una de las Bellas Artes" cada exterminador aniquila con estilo propio; a unos les da por destripar doncellas, a otras por envenenar gusanos.
ResponderEliminar¿Cómo te puedes autocalificar hombre carcoma? No puede ser que un hombre regordete, desaliñao y con ese pelo brillante por aquello de la grasa, sepa hacer tanto daño.
ResponderEliminarTú eres un donnadie amoroso. No sabes matar una mosca. ¿O sí?
flower, que no te engañen las apariencias, el gusano de la carcoma, fuera de su agujero, tiene ese aspecto de mindundi que tan bien describes. Las moscas no entran en el menú salvo cuando como sopa en restaurantes de dudosa reputación.
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