martes, septiembre 27, 2011

LA ÚLTIMA CORRIDA (DE TOROS)

 

DESMEMORIAS DE UNA FASHION VICTIM


Sé que prometí no volver a hablar del viaje a China, pero tampoco creo haber hablado nunca de moda, vaya lo uno por lo otro.

Las lavanderías de Asia son una delicia para el viajero. Por un par de euros el kilo te lavan la ropa, te la planchan y es posible que tu mochila esté a la vuelta más ordenada que a la ida. Pero, por si esto falla, cuando viajo tengo por costumbre llevar la ropa más vieja que tengo y la voy abandonando por el camino.
El caso es que en esta ocasión las lavanderías no estaban tan a mano como mis pies habrían deseado por lo que hubo que recurrir al plan B: tirar las camisetas resudadas y comprar ropa nueva.
En una calle comercial desdeñé una tienda de ADidash que estaba junto a otra de Adidhas, que tenía puerta con puerta otra de Ah didas; al final de la calle entré en una tienda Adidas.
El dependiente muy amable, al enterarse de que era español y que buscaba un chandal elegante, me dijo al oído que tenía una sorpresa para mí: la futura equipación del equipo español para el próximo mundial, y me enseñó esto:
¡¡¡¡LA ADIDAS TOREROO!!!!


No pude contener la emoción. Por fin la Roja iba a lucir un atuendo deportivo que iba a reflejar su idiosincrasia, al fin la selección iba a vestirse haciendo honor a la furia española, con un terno que reflejase toda la pureza del sentir de un pueblo.
Como en China siempre te da la sensación de que te están tangando y de que todo es de palo, me fui a un Ciber próximo, entregué mi pasaporte y tras comprobar que la policía no estaba de redada me metí en la página oficial de Adidas. El dependiente no mentía, allí estaba. Haced la prueba si sois tan descreídos como yo.
Volví a la tienda y no pude evitar probarme esa maravilla. 
El traje de luces es por su propia naturaleza ajustado. Aunque tenían varias tallas (lo que prueba que aquel modelo no era de exhibición sino que se vendía bastante bien) dudé de que alguna me sirviera. Hay que tener en cuenta que, pese a que ni yo ni Obelix reconoceremos jamás nuestra gordura,  mi talla en China es una 2XXXL y aquel modelito estaba hecho para  chinorris fashion-victim`s que, aunque la anorexia allí no se estila mucho, son pelín tirillas. El vendedor insistió en que me la probara y cuando un chino se empeña en algo..., ¡tenaces son rediós!
Contuve cuanto pude la respiración para embutirme en la chaquetilla. Lo logré aunque las costuras estaban más tensas que Chewaca anunciando la Epilady.
Traté de calzarme la taleguilla. ¡Ay la taleguilla! Creo que una taleguilla como esa era lo que usaban los emperadores para llenar de eunucos la Ciudad Prohibida. La taleguilla es ajustada por definición como defensa del torero y con el fin de realzar sus atributos. Aquel modelo cumplía perfectamente su misión porque lo marcaba todo, especialmente lorzas. Me miré al espejo para comprobar el empaque que me confería el terno, efectivamente parecía empacado. ¿Cómo expresar en dos palabras como me sentía al contemplar el reflejo de mi efigie?: "vergüenza torera". 
El amable dependiente me preguntó con una sonrisa dentona si me tiraba de la sisa.
-¿De la sisa? Lo que me tira es de los...
Al llenar los pulmones para gritarle, los abalorios empezaron a saltar, disparados como balas negras.
Cuando mi rostro empezaba a adquirir un tinte purpúreo, muy a tono con el traje, decidí desistir y cortarme la coleta, colgando el traje de luces para siempre.
El chino dependiente (que no es lo mismo que un chinodependiente) al ver frustrada la venta me reprochó a voces:
-Tú no compras. Mala idea. Esto pronto será mucha moda en España.

El caso es que tenía razón el jodío. Mientras que en China empiezan a celebrar corridas de toros usando banderillas de velcro, que eso es algo que hay que ver, al llegar a España me encuentro con que en Barcelona celebran la última corrida. Como para compensar, las pasarelas se han llenado de modelitos como el que yo me probé. Incluso EL PAÍS ha sacado un nuevo suplemento de moda en el que un osado fotógrafo y una estilista se han conchabado para disfrazar a un caballo de picador con un traje de torero. Vedlo, incrédulos.



Sé que a algunos os encantaría ver fotos mías en el probador con el chandal puesto. La verdad es que lo intentamos pero el chino no nos dejó y se mosqueó mucho porque: En Occidente lo copian todo.
Para compensaros os dejo con otras fotos de moda torera de una chica llamada Verónica, para que podáis celebrar la última corrida como Dios manda. Y que Dios reparta suerte porque, como reparta justicia...




3 comentarios:

  1. Si uno puede desviar los ojos del culo de Verónica (sé que es difícil) y fijarse en la foto de Sarah (sé que es más difícil) comprobará que llevan el mismo traje de luces.
    El reportaje de Soho es muy anterior al de EL PAÍS (Foto: Gonzalo Machado. Estilismo: Isabel Moralejo)

    El chino tenía también razón en eso: En Occidente lo copian todo.

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  2. ¿Fabrican en China chándales de lagarterana?.
    Voy pa las afotos, que me ha parecido ver pasar un templo de Angkor Wat.

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  3. Cuucha, hace tiempo que Forges deslocalizó su fábrica de Lagartera y abrió una sucursal en Yangshuo.
    Mira como es un traje de luces tradicional chino http://www.flickr.com/photos/jonnyfromtheblock/4863100297/

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