miércoles, mayo 16, 2012

SOY UN CUTRE


Soy un cutre. Lo confieso. Con los años lo voy asumiendo.
Un cutre es una persona que por más que se esfuerce, por más que se lo curre o por más que gaste no le cunde nada. Y es que esta clase de gente se come (nos comemos) mucho la cabeza tratando de resolver la ecuación calidad-precio, intentando comprar lo mejor al precio más bajo, alcanzar la excelencia al menor coste, conseguir la mayor satisfacción erótica con el mínimo desgaste emocional. Y como no resolvemos bien la ecuación el resultado es un fracasito y la vida no nos recompensa con ningún premio. Van unos ejemplos:

El primer cutre de la historia fue Caín. Caín y Abel . Uno paleando estiércol bajo un sol de castigo mientras el otro se queda tumbado a la bartola mirando a las ovejas. Uno ofrece en sacrificio un costillar de lechazo y el otro cuatro zanahorias. No hay color. Porque Dios tendrá sus defectos pero no es vegetariano.  Los cutres somos la estirpe de Caín, arrastramos su maldición bíblica y recorremos el mundo cabizbajos; total, por un asesinato de más o de menos.

El cutre se compra un smoking y le queda como un chándal, ¿por qué? Porque se arrepiente de haber entrado en la tienda y luego compra lo más barato. No se compra un Ferrari se compra un Skoda. Y todo lo paga en efectivo, a tocateja, sin que le descuenten un duro. Mientras le cobran, él observa de reojillo como el otro que está en la caja paga sus compras con un montón de  cupones y vales descuento, no suelta un euro y encima le regalan los tickets del parking, unas copas en la cafetería y una corbata de seda.
 No es que sea un rata, al contrario, te puedes gastar ingentes cantidades de dinero, pero no te cunde. El cutre paga una ronda de copas, el camarero se equivoca (tal vez a posta, porque nunca le dejas propina) y le entrega la vuelta a otro, el muy cabrón se guarda la vuelta y no dice nada y los invitados le dan las gracias a él. Y se mosquearán contigo porque no volverás a pagar otra ronda y encima estarás mohíno toda la noche.
Te vas de hotel y escoges uno con más estrellas que una noche en el desierto. Pues te alojan en una habitación al lado del ascensor, sobre una salida de humos, con el somier jodido y una moqueta levantada en la que siempre tropiezas.

¿Por qué me pasa esto?
Porque los conserjes de hotel,  los dependientes y sobre todo las tías huelen en seguida tu cutrez y te ningunean, y se aprovechan de las circunstancias.
Es el día de tu aniversario de bodas y te acercas a una joyería dispuesto a tirar la casa por la ventana. Te detectan la cutrez incluso antes de entrar porque te tienen un rato picando al timbre de la puerta hasta que te abren. Tú venías pensando en un anillito con un diamante pero el joyero te persuade para que compres un collar de brillantes que es mucho más chic. Tú te justificas y replicas que nunca habías visto diamantes marrones y él te contesta que en realidad son color champán. Te defiendes diciendo que nunca habías visto champán marrón y él te estoquea alegando que la gente que sólo bebe cava cómocoñovaasaberdequécoloreselchampán. Y ahí te hiere en medio del corazón, justo a la altura de la cartera; herido en tu orgullo desangras tu Visa en esa maquinita que cuando la accionan replica el sonido de una guillotina y vuelves a casa con el collar de marras. Cuando se lo regalas a tu mujer ella pensará que son zirconitas por dos cosas:
a) Porque te conoce de toda la vida y sabe que eres un cutre
b) Porque el paquete te lo ha envuelto la becaria de la joyería y está hecho un boñigo.
Total que te da las gracias con retintín y guarda el estuche en un cajón del chifonier, bajo los pijamas de invierno de donde no saldrá en la vida. Y el cajón de la lencería guay jamás volverá a abrirse para ti.

Sólo he ganado una medalla en toda mi cutre vida. Fue en una competición benéfica de minusválidos en la que llegué a meta a muchísima distancia del segundo clasificado. Los incomprensibles abucheos  me acompañaron cuando corté la cinta de llegada, durante la ceremonia de entrega de trofeos e incluso a través de la endeble puerta de  los vestuarios que, podéis creerme, no soporta un mínimo aporreo. Cuando recogí mi coche en el aparcamiento lo encontré con todas las lunas rotas y alguien había escrito con una llave en la chapa expresiones que no me habría gustado que mi madre leyera jamás. Por eso ahora, cuando aparco cerca de la casa familiar, o de aquel estadio, cubro la carrocería con uno de esos garajes de tela que venden en la teletienda.

Un cutre que se precie compra la alta tecnología en la teletienda y el pescado fresco en el Lídel. El cutre tiene la nevera repleta de botellas grandes de cocacola rellenas de agua del grifo. Y sobrecillos de ketchup y mostaza que ha acaparado en el burguer  por más que deteste la mostaza. Tiene también un trozo de queso azul. Si pensáis que el queso de Burgos no puede ser azul es porque no habéis abierto la nevera de un cutre. La comida de un cutre no tiene fecha de caducidad. Se le ha borrado. Porque aún está por descubrir el cutre que tira algo a la basura.






24 comentarios:

  1. Ay, dios... ¿ seré una cutre??? :p

    Beeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeesos nada cutres. :*

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  2. Ay, yo he único problema similar qu ehe tenido siempre, es la sensación de pagar más por todo: mi adsl es el más caro, mi seguro del coche, mi cuota del iphone, no me dan la ayuda escolar cuando hago posgrados... pero eso sí: agua mineral: lo de las botellas de coca rellenas de agua me da asquitooooo, ahí me has llegado al alma, jajajaja.

    Besos, salao

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  3. Blogboreta, tú que vas a ser cutre.

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  4. Señorita Sunshine, ¿odiabas esta canción de Revólver?

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  5. No te siento yo cutre si no un pelin quejica...Digo no te siento: porque es imposible verte por la pantallita... Esta si que es cutre!

    No te `preocupes que el que no lo sea se vuelve...si la cosa no cambia.

    Un abrazo:)

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  6. Bertha, no me prives también del placer de quejarme, para algo que me queda déjame disfrutar.

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  7. Mr.NB17/5/12

    ¿Dos que duermen en el mismo catre se colverán igual de cutres?

    Juguetón.

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  8. Soy cutre. Lo confieso. Igual no cutre cutre cutrísima porque algunas de las premisas no las cumplo, pero en otras soy campeona...
    A mí lo que más me jode es cuando vas al Corte Inglés y oye, como que te huelen, eh??? Siempre me atienden la última o si voy a preguntar cualquier gilipollez a una dependienta ocupada, siempre me contesta: Espere un momento, por favor, que estoy atendiendo a esta señora.... Y sin embargo, cuando es a mí - por finnnnnn- a quien están atendiendo, no tienen ningún reparo en contestar a las preguntas de otra gente que viene a interrumpir.... Me siento cutre en esos momentos, la verdad.

    Un beso, pazzos.

    p.s. ¡¡Qué fijación tienes con los chandals, no??? ¡¡¡¡

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  9. ...disfrute ud, disfrute, en eso no voy a ser yo la que te amarge el dia jajaja...

    Lo de Novi es digno de reflexión jajaja...

    Pazzos: seas cutre o no yo te aprecio igual;P

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  10. A mí me molan los cutres con estilo. Como tú. Jijijijijijijijijijijijijiji...

    Sinceramente, Flower

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  11. Eso no es ser cutre. Se asemeja un poco más a algún tipo de desgracia o maleficio adquirido en una vida anterior...
    Saludos.

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  12. Nancy Botwin, dos que comparten colchón se vuelven de la misma condición. Unos se vuelven cafres en el catre, otras cutres como cafres.

    Me ha gustao lechuguino, so mamaratxa, mequetrefe, mameluca (que en esto del insulto mi maestro es el capitán Haddock y su maestra parece una señorita victoriana repartiendo mandobles con su sombrilla de tela). Ministrable más que ministrable.
    La invito a una Pepsicola

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  13. Novicia, ¿y esa sensación de ser transparente en la barra del bar? Que solo te falta encender una bengala para llamar la atención del camarero. Bienvenida al club.

    Chándal es una palabra preciosa con un plural incierto: ¿chandals? ¿chándales? ¿chandales? ¿chandars?

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  14. Bertha, no, si a amargao tampoco hay quien me gane.

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  15. flower, ¿los cutres con estilo son los Cutrelux?¿Como Paco Clavel? Huy, lo que m'ha dicho.

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  16. Elvis, pues a mi me ha debido tocar ser la reencarnación de alguien bien casposo

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  17. Oh, Capitán mi capitán...

    Desde mi mansión de Borley Hall, degustando un dulce té con aroma de estramonio, le escribo a plumilla con redecilla y sin rencillas: niñato.

    Que una dama que se precie no puede ir por ahí soltando improperios (Naranjito, naftaleno, nematelminto y nulíparo)aunque los piense.

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  18. Nancy Botwin, puede que no le falte razón y yo sea un nematelminto virgen y nulíparo porque la sobaquera de mi camiseta del Naranjito huela a Naftaleno. Creo que me equivoqué al juzgarla ñoña: Está usted hecha un ñu.

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  19. ¿Pero cómo no vas a saber cuál es el color del champán? Si se puede ver en internet de tarifa plana, aunque la resolución de la pantalla que iban a tirar en el curro no sea de lo mejor.

    No creo que cutre, según esta descripción, lo mío es conciencia medioambiental y social. ;P

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  20. Bkindzanks, ¡que alivio! gracias a ti me entero que en vez de un cutre a secas soy un cutre concienciao. Y que cuando espachurro la bolsita del té para usarla por quinta vez estoy contribuyendo a evitar el calentamiento global.

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  21. ¿Lo dudabas? Hay que mirarse con buenos ojos... Si no lo hacemos nosotros, ¿quién lo hará? Ten por seguro que el resto no lo hace.

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  22. bkindZanks, para mirarme a mi mismo con buenos ojos tendría que operarme primero de astigmatismo, hipermetropía, presbicia y conjuntivitis. ¡Ah! y además quitarme un kilo de legañas por lo menos.

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  23. Ve pidiendo hora para el especialista, entonces. Estas cosas no hay que dejarlas que empeoran.



    PD. Creo, pero sólo creo, que lo las legañas hay gente que se lo quita con agua tibia.
    PD2. Jajaja... ¡Te ha faltado el estrabismo!

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  24. BkindZanks, para el estrabismo ya he encontrado cura: al cuarto whisky los ojos vuelven a su sitio.

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